El pasado día 20 de marzo se realizó en Madrid un Encuentro de Emprendedores y Empresas sobre Democracia Económica organizado por E4 - Exploradores Electrónicos y los Indianos.
La iniciativa de su promotor David de Ugarte y su equipo de colaboradores, nos permitió a los asistentes, darnos un baño estimulante de juventud en medio del protagonista invisible del azar. Mil Gracias David, equipo de colaboradores y asistentes por el gratificante encuentro.
Aparentemente, la motivación principal era la de un encuentro social de jóvenes expertos en diferentes campos tecnológicos con inquietudes y conocimientos suficientes para aglutinar ideas, proyectos y multitud de aspiraciones, en torno a las posibilidades de iniciarlas en un modelo organizativo cooperativo en un contexto en crisis del modelo capitalista.
Sin duda, la opción cooperativa es una alternativa a la actual existente, a condición de que logre modernizarse y extirpar los incorporados ingredientes perniciosos del modelo capitalista. Mejor en otro momento comentaré al respecto.
Seguiré pues, por el baño y la visión del reflejo del futuro en el agua cristalina en que cada uno cree ver lo que piensa y desea, independientemente de que así suceda y sin contar con la presencia del principal protagonista invisible, ante el cual presento mi respeto al igual que a los asistentes.
El encuentro, también ha propiciado contactar entre los asistentes dentro de los limites de disponibilidad del otro protagonista, en este caso limitativo temporal, dejando para cualquier otro momento, la iniciativa individual en explorar qué y por qué hace cada uno y con quién.
A la 1ª despedida en la puerta de la Panadería antes de ir a tomar unas cervezas, uno de los asistente entre los que había llamado mi atención y con el que no había cruzado palabra ni presentación, se me acerco y se despidió hasta la próxima con aproximadamente las siguientes palabras, "Bueno, hasta la próxima, ya ves como tú, aquí mirando y aprendiendo. Un placer". No conozco las palabras para expresar la emoción y los efectos en el alma errante oprimida en la jaula del tiempo, pero sí sé expresar el reconocimiento a mis semejantes que saben reconocerme y comprenderme. Gracias José Mª Peláez.
Recuperado a duras penas del lance anterior, sentado en la terraza, unas cervezas propiciaron el fluir de pensamientos, debates y proyectos en alternativos y cambiantes coros y asistentes. Sí coros, los cánticos al futuro y sus bondades aglutinadoras, rodeado por cuanto ya cae y se avecina, se solapa al apagado rumor de Hal que insistentemente aún sigue pidiendo a gritos que no lo desconecten. ;)))
Antes de mi despedida y algunas más, Héctor, Quique y un servidor, mantuvimos un apasionado y chispeante intercambio de conocimiento, reflexiones, coincidencias y discrepancias. Todas sin desperdicio, si bien, la esencial a mí parecer, fue la necesidad de modificar y adecuar la enseñanza, el modo de aprender, la iniciativa en actuar activamente y disponer de los medios tecnológicos sin limitaciones y accesibles democráticamente para todo el mundo en donde la primacía del conocimiento nos traerá el bienestar universal, dejando al fin, las barreras y trabas ideológicas de cualquier signo que quedarían para quién las quiera en el ámbito privado.
Con lo anterior, asomarse al límite del precipicio del tiempo, supone una pesada carga añadida a la larga factura que tenemos que pagar por cosas que uno ni siquiera ha comprado y que suponen en la inmensa mayoría una precaria existencia, entre los que me encuentro, sin que ello me desanime en buscar hasta que el azar disponga. Así pues, como todo naufrago en su particular isla, seguiré enviando mensajes en una botella a merced de las olas hasta el día que alguna llegue a quienes incite y acudan al encuentro de mi destino.
Gracias a todos por el encuentro.....
La iniciativa de su promotor David de Ugarte y su equipo de colaboradores, nos permitió a los asistentes, darnos un baño estimulante de juventud en medio del protagonista invisible del azar. Mil Gracias David, equipo de colaboradores y asistentes por el gratificante encuentro.
Aparentemente, la motivación principal era la de un encuentro social de jóvenes expertos en diferentes campos tecnológicos con inquietudes y conocimientos suficientes para aglutinar ideas, proyectos y multitud de aspiraciones, en torno a las posibilidades de iniciarlas en un modelo organizativo cooperativo en un contexto en crisis del modelo capitalista.
Sin duda, la opción cooperativa es una alternativa a la actual existente, a condición de que logre modernizarse y extirpar los incorporados ingredientes perniciosos del modelo capitalista. Mejor en otro momento comentaré al respecto.
Seguiré pues, por el baño y la visión del reflejo del futuro en el agua cristalina en que cada uno cree ver lo que piensa y desea, independientemente de que así suceda y sin contar con la presencia del principal protagonista invisible, ante el cual presento mi respeto al igual que a los asistentes.
El encuentro, también ha propiciado contactar entre los asistentes dentro de los limites de disponibilidad del otro protagonista, en este caso limitativo temporal, dejando para cualquier otro momento, la iniciativa individual en explorar qué y por qué hace cada uno y con quién.
A la 1ª despedida en la puerta de la Panadería antes de ir a tomar unas cervezas, uno de los asistente entre los que había llamado mi atención y con el que no había cruzado palabra ni presentación, se me acerco y se despidió hasta la próxima con aproximadamente las siguientes palabras, "Bueno, hasta la próxima, ya ves como tú, aquí mirando y aprendiendo. Un placer". No conozco las palabras para expresar la emoción y los efectos en el alma errante oprimida en la jaula del tiempo, pero sí sé expresar el reconocimiento a mis semejantes que saben reconocerme y comprenderme. Gracias José Mª Peláez.
Recuperado a duras penas del lance anterior, sentado en la terraza, unas cervezas propiciaron el fluir de pensamientos, debates y proyectos en alternativos y cambiantes coros y asistentes. Sí coros, los cánticos al futuro y sus bondades aglutinadoras, rodeado por cuanto ya cae y se avecina, se solapa al apagado rumor de Hal que insistentemente aún sigue pidiendo a gritos que no lo desconecten. ;)))
Antes de mi despedida y algunas más, Héctor, Quique y un servidor, mantuvimos un apasionado y chispeante intercambio de conocimiento, reflexiones, coincidencias y discrepancias. Todas sin desperdicio, si bien, la esencial a mí parecer, fue la necesidad de modificar y adecuar la enseñanza, el modo de aprender, la iniciativa en actuar activamente y disponer de los medios tecnológicos sin limitaciones y accesibles democráticamente para todo el mundo en donde la primacía del conocimiento nos traerá el bienestar universal, dejando al fin, las barreras y trabas ideológicas de cualquier signo que quedarían para quién las quiera en el ámbito privado.
Con lo anterior, asomarse al límite del precipicio del tiempo, supone una pesada carga añadida a la larga factura que tenemos que pagar por cosas que uno ni siquiera ha comprado y que suponen en la inmensa mayoría una precaria existencia, entre los que me encuentro, sin que ello me desanime en buscar hasta que el azar disponga. Así pues, como todo naufrago en su particular isla, seguiré enviando mensajes en una botella a merced de las olas hasta el día que alguna llegue a quienes incite y acudan al encuentro de mi destino.
Gracias a todos por el encuentro.....
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