Ayer, seis horas duró que el gobierno diera marcha atrás, en grabar con un impuesto las rentas más altas de deportistas, ahora dicen que en otoño se verá, supongo a resultas de cómo salga adelante el presupuesto del 2010.
Hace unos días un grupo de millonarios alemanes ofrecía pagar un impuesto transitorio del 5% sobre sus ingresos. Buena iniciativa que habrá que seguir y ver en qué queda.
Aquí mientras, haciendo bolillos. Entre manifiestos de expertos, primero 100, seguido de 500 y 700, añadido a los portazos de los gobernantes, dirigentes y representantes sociales de turno, a los ciudadanos, veremos hasta dónde llegan los panfletos y manifiestos, si se siguen añadiendo leños en la pira humana al fragor de fondo de la tragedia.
Esta entiendo, es la verdadera gran tragedia, que primen los números, las cosas o chismes a costa de los seres humanos. Si esta es toda la inteligencia y las luces de quienes tienen la responsabilidad de guiar los pasos de la civilización, en la primera que pueda me apeo, antes de que se les ocurra y empiecen a cobrar por respirar.
Si esta exposición les parece incendiaria, inquietante y escandalosa, que así sea. Desde hace tiempo tengo las plantas de los pies chamuscados y he dejado de sentirlos.
Así, mientras dure la crisis, se podría aplicar un impuesto directo, al tirón, de un 5% sobre ingresos, por ejemplo, a partir de 5.000 euros al mes o 60.000 euros año, dejando al margen sin tocar los tramos del IRPF.
Con este impuesto directo de fraternidad y solidaridad para ayudar a salir de la crisis, se recaudaría el suficiente dinero para financiar directamente los medios necesarios para ocupar a los desempleados y otros en multitud de actividades.
Pienso como razonable que, mejor será actuar con una medida impopular para 5 millones a que nos estampemos todos, 47 millones de personas, por el precipicio.
Hace unos días un grupo de millonarios alemanes ofrecía pagar un impuesto transitorio del 5% sobre sus ingresos. Buena iniciativa que habrá que seguir y ver en qué queda.
Aquí mientras, haciendo bolillos. Entre manifiestos de expertos, primero 100, seguido de 500 y 700, añadido a los portazos de los gobernantes, dirigentes y representantes sociales de turno, a los ciudadanos, veremos hasta dónde llegan los panfletos y manifiestos, si se siguen añadiendo leños en la pira humana al fragor de fondo de la tragedia.
Esta entiendo, es la verdadera gran tragedia, que primen los números, las cosas o chismes a costa de los seres humanos. Si esta es toda la inteligencia y las luces de quienes tienen la responsabilidad de guiar los pasos de la civilización, en la primera que pueda me apeo, antes de que se les ocurra y empiecen a cobrar por respirar.
Si esta exposición les parece incendiaria, inquietante y escandalosa, que así sea. Desde hace tiempo tengo las plantas de los pies chamuscados y he dejado de sentirlos.
Así, mientras dure la crisis, se podría aplicar un impuesto directo, al tirón, de un 5% sobre ingresos, por ejemplo, a partir de 5.000 euros al mes o 60.000 euros año, dejando al margen sin tocar los tramos del IRPF.
Con este impuesto directo de fraternidad y solidaridad para ayudar a salir de la crisis, se recaudaría el suficiente dinero para financiar directamente los medios necesarios para ocupar a los desempleados y otros en multitud de actividades.
Pienso como razonable que, mejor será actuar con una medida impopular para 5 millones a que nos estampemos todos, 47 millones de personas, por el precipicio.
No sé qué pensarán ustedes, yo tengo muy claro lo que prefiero.
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